La presentación del Libro del Carnaval es “la referencia inicial” de las Fiestas Grandes del 2018, tal y como definió el propio alcalde Juan Tomás Muñoz al finalizar nada más abrirse el telón y dar la bienvenida de manera oficial al conocido como Precaranval Cultural. El acto contó no solo con la intervención del propio alcalde, sino además con la de la concejala delegada de Cultura [Azahara Martín], quien fue desgranando los entresijos de un Libro que vuelve a superar las 500 páginas tras haber disminuido de volumen el pasado 2017 -en concreto el 39 volumen de la historia del Carnaval tiene 504- en las que se refleja como ejes centrales el Asedio de Ciudad Rodrigo y referencias póstumas a Ceferino Santos Alcalde -creador e impulsor del Libro del Carnaval y fallecido el pasado mes de octubre-. También se hace referencia a la celebración del 60 aniversario del nacimiento de la primera Murga femenina [‘La Flor de Miróbriga’] Las habituales crónicas locales -entre ellas la del pasado Carnaval con un amplio reportaje fotográfico- junto con las colaboraciones dan forma a un nuevo ejemplar del Libro del Carnaval que tiene un precio de venta de 12 euros y del que se han elaborado 1.000 ejemplares.

El colofón al acto lo puso la emisión de un resumen-documental del Carnaval de hace 20 años -1998- en el que el público asistente al acto rememoró viejas hazañas carnavaleras. Así, de este modo, Carlos García Medina, Manuel Santos Alcalde o Juan Antonio Mates ‘Madroñeras’ tendieron un puente entre las dos décadas del Caranval y rememoraron de viva voz las andanzas de un Carnaval pasado por agua en su primera jornada completa y en el que después el sol lució. El Alfonso Ussía fue el pregonero de las Fiestas Grandes de Miróbriga y abarrotó no solo el Teatro Nuevo ‘Fernando Arrabal’ sino la Plaza Mayor para escuchar un pregoncillo en el que el vil asesinato de Miguel Ángel Blanco aún estaba ‘caliente’. El miedo al terrorismo y el canto a la “libertad” del Carnaval fueron el eje de su intervención. Cristina Clavo Ronco fue Reina del Carnaval del Toro del 2018; y el hoy ya torero en retiro Abraham Barragán [“De Albacete”, apuntó Ángel de Elías] fue Triunfador del Bolsín.

En el apartado taurino tres hechos a destacar: la decepción de los toros ‘patitas blancas’ de Barcial el Martes de Carnaval, el cambio en el recorrido del encierro a caballo y la muerte a caballo de Manolo Gallego y la celebración de la primera capea nocturna de Lunes de Carnaval de la historia. Jesulín de Ubrique fue protagonista indiscutible de unos Festivales del Carnaval que contaron con Víctor Puerto, Fintio de Córdoba, Javier Conde o los espadas mirobrigenses José Luis Ramos y José Ramón Martín -Martes y Sábado, respectivamente-. El encierro de mansos lo protagonizaron cuatro bueyes de Manuel Santiago Corvo, al igual que las dos capeas nocturnas -tal y como sucederá este ya inminente Carnaval del Toro de dos décadas después- y el encierro del Sábado. El encierro a caballo del Domingo contó con utreros de los Herederos de Manuel Santos Alcalde -a la sazón, previo a la bravura de aquella edición del Carnaval- y el descenso hasta Miróbriga se produjo por la Cañada hasta el mismo cruce con el ‘Vado de las Vacas’ antes de girar noventa grados hacia la derecha y tomar la carratera de Sanjuanejo en dirección hacia Ciudad Rodrigo. Los toros del Lunes lucieron la célebre divisa de Don Antonio Pérez de San Fernando, al igual que la espectacular parada de bueyes cárdena, que repitió labores en el encierro del Martes. Toros de Barcial, para cerrar el Caranval. La ‘comidilla’ de la previa. Y el refrán taurino, a colación: “Expectación y decepción”. “Los toros ‘chutados'”. La tremenda parsimonia del último desencierro como triste final. El Toro del Aguardiente, donado por Pedro Ratero y Eugenio Bernal, perteneció al hierro de Francisco Galache de Hernandinos. En cuanto a los disfraces del Caranval, uno sobre el resto. Histórico. Entró en la leyenda. ‘Dodotis’: perfecta encarnación de un bebé a lo largo y ancho de todos los Carnavales. Y en ‘cueros’. Sin trampa ni cartón. La mecha hacia el Carnaval del 2018 ya está encendida: “¡Feliz Carnaval!”, ha sido, de hecho, la despedida.